Funckenhausen lanza una nueva línea de vinos cofermentados que fusionan su historia
En la fusión encontramos nuevas formas. Esas combinaciones un tanto científicas y un tanto artísticas a veces dan resultados sorprendentes. Creatividad e intuición, son dos premisas que se unen para dar origen a este relato.
The Funckenhausen Co. (Company – Cofermentaciones) nace de la unión entre las raíces alemanas y la expresión argentina. Una línea de vinos que toma a la cepa Riesling – tan representativa de la Alemania natal – como hilo conductor para co-fermentarla con otros varietales y expresiones locales.
El primer producto de la línea – The Funckenhausen Co. Malbec – es un vino en el cual se fermentan conjuntamente un 94% de Malbec con un 6% de Riesling el cual se embotella luego en la botella típica y representativa de Riesling.
Tomando a la co-fermentación de Syrah y Viognier como referencia y sabiendo que la mencionada elaboración de uva tinta con un pequeño porcentaje de uva blanca aporta al mismo una mayor estabilidad de color, una paleta aromática de mayor complejidad y fluidez en la boca por la mayor acidez; el equipo técnico de Funckenhausen que lidera la enóloga Jimena López se sumergió para estudiar los porcentajes que permitiesen lograr lo anterior buscando ofrecer un vino más complejo que no perdiese su identidad.
En las palabras del presidente de la empresa y nieto del fundador – Alejandro Leirado Heinlein: “The Funckenhausen Co”. es el resultado de distintas piezas de un puzle que fuimos armando muchas veces guiados por la intuición. Es una línea de vinos que nos permite complementar el portafolio de la marca descontracturada de la bodega compuesta 100% por blends, manteniendo la originalidad, pero sin perder el norte: que es elaborar vinos con una marcada identidad y sin dejar de buscar ser un referente de alta calidad en San Rafael.”
Bodega Funckenhausen, blend de historias
Es un proyecto familiar boutique, con raíces y nombre de origen alemán, que nace de la fusión entre la identidad alemana y la argentina.
El nombre y el escudo La historia de la familia Funcke – antepasados del fundador, se remonta al sigo XIX cuando Emy Funcke emigra desde Alemania a Argentina. Años más tarde, su nieto Kurt Heinlein – empresario argentino vinculado al rubro marítimo – decide recorrer Mendoza en la búsqueda de un terruño que le permitiese concretar un viejo anhelo: establecer un emprendimiento vitivinícola que rinda tributos a sus antepasados conformando también un legado para las generaciones futuras.
Después de recorrer meticulosamente varias regiones de Mendoza, Heinlein encontró el lugar perfecto para hacer realidad su sueño: una propiedad de 330 hectáreas con vistas majestuosas a la precordillera. Aquí, plantó viñedos y olivos, iniciando así el emocionante proyecto desde sus mismas raíces.
La primera línea de vinos de Funckenhausen, bautizada con el evocador nombre de “La Espera”, rinde homenaje al tiempo y la paciencia que fueron necesarios para llevar a cabo este sueño.
El viñedo de Funckenhausen se encuentra en una de las zonas más elevadas y cercanas a la pre-cordillera en San Rafael – 25 de Mayo – a 850 metros sobre el nivel del mar. Suelos aluvionales influenciados por el río Diamante, temperaturas promedio más bajas comparativas al resto del oasis sur y una gran amplitud térmica proporcionan condiciones sumamente atractivas para el cultivo. Sumados a estas, los vientos constantes y ambiente seco que caracteriza la región aseguran la sanidad del viñedo permitiendo una viticultura orgánica sin mayores dificultades.
Dado el arraigo con la tierra que dio de Funckenhausen, que se replican en las etiquetas de sus vinos, tienen origen germánico y representan a la región de donde provienen los primeros antecedentes de la familia Funcke, antepasados de Kurt Heinlein. Tras realizar varios estudios se determinó que el escudo simboliza a una familia de herreros, por eso la presencia de estrellas o chispas (Funcke).