
Tomero, es la colección de vinos varietales que nació en el año 2004, un año después que se fundará Bodega Vistalba. Para sorpresa de sus elaboradores (La familia de Carlos Pulenta) la primera cosecha del Tomero Gran Reserva fue elegida en 2005 como Mejor Malbec del mundo, en el concurso Malbec al mundo, que organizaba el Instituto Nacional de Vitivinicultura.
Tomero es una colección que tiene una trayectoria que la precede, con un estilo bien marcado que refleja lo mejor de las uvas la finca de 400 hectáreas ubicada en Los Arboles, Tunuyán, Valle de Uco. Plantada en 1980 por Don Antonio Pulenta, padre de Carlos y fundador de Bodega Vistalba.
Tomero es sinónimo de consistencia. Año tras año la bodega se esfuerza por mantener el estilo, las características y la esencia de cada uno de los vinos. Esto lo logran gracias a poder trabajar el viñedo tal cual lo necesitan con el objetivo de obtener las uvas en las condiciones ideales para cada vino. Saben que en el viñedo se empieza a definir los vinos y ahí es donde ponen la mayor parte de la atención. Tomero es sinónimo de expresión.

El equipo enológico tiene como objetivo principal mostrar la tipicidad de cada varietal en su máxima expresión, cuidando los trabajos en bodega y su crianza para que el protagonista sea siempre la uva. Tomero elabora 9 varietales diferentes (Malbec, Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Petit Verdot, Pinot Noir, Syrah, Semillon, Sauvignon Blanc, Chardonnay) y el objetivo es que todas las uvas elaboradas como varietales expresen sus características con la mayor tipicidad varietal.
El Tomero es un oficio que nace en 1884 cuando la provincia de Mendoza sanciona la Ley General de Aguas y crea la tarea de administrar el derecho a riego natural para los viñedos y hace referencia a la persona encargada de abrir y cerrar las tomas de agua para el riego de los viñedos. Con esta línea de vinos, Bodega Vistalba rinde un merecido homenaje a quienes se dedican a este noble oficio, verdaderos guardianes de la distribución del agua proveniente del deshielo de la Cordillera de los Andes. El cuidado y la optimización del uso del agua están íntimamente ligados a los valores del tomero, quien desde temprana edad aprende este oficio de la mano de sus padres y abuelos, siendo una tradición que se hereda orgullosamente.
Hace 20 años Carlos Pulenta dijo: “Vamos a elaborar una colección de vinos a la cual llamaremos Tomero en honor al oficio de la persona que administra uno de los recursos más escasos que tenemos y necesitamos. El agua es el recurso más valorado porque históricamente su cuidado y las obras hídricas permitieron transformar en un oasis lo que era un desierto. Y es gracias al agua y a su cuidado que hoy podemos cultivar nuestras uvas que dan origen a grandes vino”.
Reflejados en los vinos, hoy podemos decir que Tomero también se inspiró en transmitirse de generación en generación y hoy ofrece 3 estilos bien identificados y con su personalidad definida y marcada por una trayectoria de 20 años.
La colección de Tomero está integrada por el Así es la colección TOMERO Clásico, TOMERO SINGLE VINEYAR y TOMERO CUARTEL 41
Te invitamos a escuchar el informe en Sabores de Argentina con el testimonio de Paula Pulenta